Cómo deshacerse de la procrastinación
Consejo 1. Desecha la lógica
Una vez que decides qué hacer, la lógica y los principios básicos no pueden ayudarte. La cría de serpiente que vive dentro de ti se reconciliará, se asustará y se emocionará, pero no podrá hablar ni razonar.
Consejo 2: La comodidad es importante
Si tienes hambre, estás cansado o frustrado, tu cría de serpiente se rebelará. Si no te cuidas, llorará, gritará o incluso se negará a hacer lo que le digas. Existe para este propósito. Así que come bien, duerme bien y tómate un tiempo para disfrutar.
Consejo 3: Desarrolla un mecanismo de disciplina
Establece una rutina de premios y castigos. Si quieres que un niño coma verduras, no le des el postre primero. Recompénsate por el éxito y aplica las penalizaciones de categoría establecidas por el fracaso. Como luchar por un objetivo común y trabajar en equipo, la presión social puede afectar a Rex.
Consejo 4: Incitar las emociones
Rex responde a las emociones. Este es su "lenguaje". Así que déjate emocionar, déjate asustar. Los discursos, películas y artículos motivacionales pueden funcionar por un tiempo. Utilicé música dramática (una de mis listas de reproducción favoritas se llama "Música para conquistar el mundo"). Imagínese la alegría de completar algo o el miedo al fracaso. Deja que tu imaginación sea lo suficientemente vívida como para sacudirte. De hecho, a menudo utilizamos trucos similares para engañar a los niños basándonos en el mismo principio: "¡Cepilla tus dientes, de lo contrario se te caerán todos los dientes!".
Consejo 5: Conduce para empezar
Lo más importante que puedes hacer es empezar. Los instintos de Rex en su mayoría se resisten al cambio. Pero una vez que empiezas algo, ese instinto empieza a apoyarte. Con suficiente tiempo, incluso puedes convencer a Rex de que se enamore de hacer las cosas que "odia". Lo mismo ocurre cuando llevamos a nuestros hijos a la escuela o a aprender a tocar el piano.
Consejo 6: Sé exigente con el medio ambiente
Rex es miope y poco inteligente. Si ve el ícono de Facebook, quiere jugar. Es como dejar que sus hijos vean un excelente programa de televisión a la hora de dormir. Diseñe su entorno para que esté libre de distracciones: abandone la mensajería instantánea, desactive los recordatorios, cierre su correo electrónico. Tenga áreas de trabajo y entretenimiento separadas y, mejor aún, computadoras separadas (o al menos cuentas separadas).
Una vez que sepa dónde están las causas fundamentales, podrá empezar a detectar los patrones y controlarlos.