¿Qué es la ionización?
La ionización se refiere a electrolitos (moléculas: como ácido acético (ácido acético) CH3COOH (C2H4O2), monohidrato de amoniaco (agua amoniacal) NH3·H2O, ácido sulfúrico (sulfuro de hidrógeno) H2S, ácido clorhídrico (clorhídrico). cloruro de hidrógeno ácido) HCl, etc.; cristales, como NaCl, NH4NO3, etc.) son un proceso que genera iones libres en solución acuosa o en estado fundido.
La ionización, también conocida como ionización o ionización, se refiere al proceso en el que los átomos y moléculas forman iones bajo la acción de la energía (física). Se refiere a un átomo o molécula que gana una carga negativa o positiva al ganar o perder electrones para formar iones, generalmente en combinación con otros cambios químicos. La ionización produce la pérdida de electrones después de colisiones con partículas subatómicas, colisiones con otros átomos, moléculas e iones, o mediante interacciones con la luz. Las reacciones de heterólisis y sustitución de heteroátomos pueden conducir a la formación de pares iónicos. La energía de ionización sufre el proceso de conversión interna de desintegración radiactiva y utiliza su energía para excitar los electrones internos del núcleo para expulsarlos.
La ionización se puede subdividir a grandes rasgos en dos tipos: ionización secuencial e ionización no secuencial. En la física clásica sólo puede producirse una ionización continua. La ionización discontinua viola varias leyes físicas y pertenece a la ionización cuántica.