Quiero decirte algo. La composición no debe tener más de 400 palabras, en formato carta.
Querida mamá: ¡Quiero decirte, gracias! Gracias por su continuo cuidado y amor por mí. Siento profundamente tu dedicación y esfuerzo en mi crecimiento.
Siempre me enseñas a ser una persona responsable y cariñosa, a respetar a los demás y a valorar la vida. Estas enseñanzas siempre han estado profundamente grabadas en mi corazón y se han convertido en una guía para mis acciones.
Aunque criticarás mi comportamiento y mis logros, sé que es porque esperas que pueda ser mejor y alcanzar un nivel superior. Siempre me brindas un cuidado incondicional, tanto en el estudio como en la vida.
Cuando estuve enfermo, me cuidaste día y noche, y tú mismo estabas cansado y enfermo. Pero nunca me dejaste hasta que me recuperé. Me hizo sentir la grandeza y el desinterés del amor maternal.
Mamá, sé que a veces seré obstinado y desobediente, causándote problemas. Pero crea que trabajaré duro para corregir mis errores y convertirme en una mejor persona. Siempre recordaré tus enseñanzas y cuidados y los convertiré en poder de acción.
Por muy tortuoso que sea el camino que tengo por delante, seguiré adelante con firmeza porque sé que tú siempre estarás a mi lado para apoyarme y animarme.