¿Cuáles son las principales diferencias entre el teatro actual y su homólogo isabelino?
Agregaré a las excelentes respuestas ya enviadas.
No existe una "cuarta pared". Los primeros teatros modernos utilizaban escenarios de empuje. El escenario propulsado tiene tres lados orientados al público. A menudo se dice que la gente escucha una obra de teatro en lugar de mirarla. El público de la época de Shakespeare solía ser estridente y reaccionaba ante los actores, y los actores tenían que reaccionar. En el escenario hay taburetes, llamados "taburetes ricos", donde los jóvenes elegantes se sientan específicamente para ser vistos. A menudo prestaban poca atención a la obra, charlaban entre ellos y no tenían inconveniente en cruzar el escenario en mitad de la obra para saludar a los amigos.
A mediados del siglo XVI, Italia introdujo el "escenario de proscenio". El escenario estaba separado del público por un arco, que se denominó "arco de proscenio". Los actores y el público ahora están separados y el público mira la obra como a través de una ventana. Finalmente se agregaron cortinas para permitir cambios de escenario entre escenas. Finalmente surgió la idea de la “cuarta pared”. Este es un término utilizado por los actores para expresar una relación con una audiencia. En el drama moderno, los actores no necesitan dirigirse al público como si hubiera una pared transparente entre ellos.
El teatro isabelino era principalmente un evento al aire libre. El Teatro Blackfriars de Shakespeare no se fundó hasta 1596, y su compañía no recibió nuestra licencia hasta 1608. En un anfiteatro las obras se representan directamente, sin intermedios ni pausas escénicas. Una vez que la obra se trasladó al interior, la iluminación se convirtió en un problema. Aunque el espectáculo se desarrolla durante el día, la iluminación artificial corre a cargo de velas, que deben recortarse periódicamente durante el espectáculo. Esto requiere aplicar los frenos en mitad de la acción, lo que afecta la escritura del guión.
No hay "ejecución" de una obra. Hoy en día, es común que una empresa ejecute el mismo conjunto de juegos durante semanas enteras. Una obra de Broadway puede durar varios años y el elenco cambia con frecuencia. En el teatro isabelino, una obra rara vez se representaba más de una vez. Por ejemplo, después de una representación de Noche de reyes, todos los humoristas pueden aparecer al día siguiente. Tampoco hubo largos ensayos. Los actores llegarían la mañana del espectáculo, aprenderían sus líneas (con suerte), superarían los bloques (dónde se paran o se moverían) y luego actuarían por la tarde.
Si la obra es nueva (que suele ser el caso), los actores actuarán sin conocer el guión completo. En cambio, reciben indicaciones, con cada página pegada con cinta adhesiva y enrollada, de ahí el origen de la palabra "personaje" (la ortografía proviene del francés). Es habitual que un actor actúe en una docena de obras al mes, y 30 o más al año, muchas de las cuales son nuevas. Al parecer, tienen recuerdos increíbles.