"Chicas malas"
"Mean Girls" - Convergencia lingüística
Kady Heron creció en la jungla africana con sus padres zoólogos. Después de regresar a los Estados Unidos, Katie asistió a North Shore High School, su primera experiencia educativa formal. Pronto, Katie descubre que las jerarquías y la naturaleza depredadora de la vida en el campus son tan crueles como lo que vio entre los primates en la jungla. Su nueva escuela está llena de grupos sociales, incluidos los Plastics y los Math Geeks.
Los impopulares amigos de Katie, Janice y Damian, convencen al popular club "Plastic" de sus chicas para que recopilen información para poder combatir la arrogancia de cada uno. Para Katie, unirse a las chicas populares consistió en parte en aprender y utilizar el vocabulario interno del grupo "plástico". Cuando Katie empezó a hablar con las chicas, su líder Regina le gritó: "¡Cállate!". Sin estar familiarizada con el uso de la jerga de la palabra, Katie sólo pudo responder: "No dije nada. Ah". , Katie rápidamente pudo utilizar estas palabras "plásticas" con fluidez, como: ¡Búnker! ¡Pulverización! Tan feo y demás.
En este ejemplo de convergencia lingüística, es interesante observar que a medida que Katie comienza a hablar cada vez más como los miembros de Plastics, sus valores y comportamientos también se vuelven cada vez más similares a los de ellos. Al final de la película, ella toma algunas decisiones importantes sobre ella y sus amigos, incluyendo dejar de hablar y actuar como una "chica mala".