Jiuquan "¿Qué tiene de mágico?"
El vino que bebemos ahora es elaborado por personas después de cosechar granos en los campos y pasar por múltiples procesos como procesamiento, fermentación, cocción y elaboración de cerveza. Cada gota de vino encarna el esfuerzo de muchas personas. Pero en la isla de San Salvador, en el sur de Cuba, existe un tipo de vino que no requiere tantos problemas para elaborarlo: el mágico "vino de primavera".
Esta agua de manantial brota tres veces al día, exudando un leve aroma a vino. Después de beberla, la gente se siente relajada y renovada. Los habitantes de la isla son todos buenos bebedores y a todos les gusta beber el vino que les da la naturaleza. Cuando los invitados vengan de visita, beberán con ellos "buen vino" del agua del manantial. Los días de boda, los residentes beben este vino natural con los recién casados, porque beber vino elaborado con agua de manantial simboliza "salud, longevidad y envejecimiento juntos".