Frases clásicas de la novela "Wei Ran Cheng Feng"
Tu sonrisa se convierte en el mar, y mi sonrisa se convierte en el viento.
Tengo baja autoestima y orgullo, por eso soy egoísta.
No soy el Buda en el escenario que salva a todos los seres sintientes, y no soy el diablo que encanta el alma en el inframundo. Estoy rodeado de prosperidad, pero no tengo dónde vivir.
Abandonaré el barco que ha perdido el timón.
Si no puedes ser feliz por mi culpa, entonces aléjate. Si no puedes hacerme feliz, aléjate.
No soy tan amable como ves. No esperes que sea entusiasta con todos.
Cada uno debe aprender a conocer su propia situación y hacer las paces consigo mismo.
Yo rindo homenaje a mis recuerdos en el viento, y tú destruyes el pasado en la lluvia.
Gracias al mejor momento, conocí a la más bella tú.
Tú y yo no nos hemos conocido en todo el año, pero gracias al tiempo, nunca nos rendimos.