¿Qué debo hacer si mi perro le tiene miedo a los petardos?
Esta es la primera vez que un perro experimenta la atmósfera de Año Nuevo y temblará de miedo cada vez que escuche el sonido de los petardos. En este momento, el dueño teme que se asuste, por lo que inmediatamente se apresurará a levantarlo, sostenerlo con fuerza en sus brazos y consolarlo para que no tenga miedo. Al principio, el perro pensó que los petardos eran solo un fuerte estallido repentino, tal vez estaba asustado, pero después de que el dueño lo abrazó, pensó que los petardos eran algo aterrador porque incluso el dueño tenía miedo de eso. Por lo tanto, los propietarios jóvenes que celebran el Año Nuevo con sus perros por primera vez no deben consolar a sus perros cuando suenan los petardos. Sólo necesitas decir con emoción y tono estable: "Son sólo petardos, no hay nada de qué preocuparse" y tirar un puñado de bocadillos al mismo tiempo. Si lo sostienes y lo consuelas, solo le dará mucho miedo porque tú también estás asustado. Su comportamiento tranquilizador agrava el miedo de su perro a los petardos.
Si tu perro ya tiene miedo a los petardos, aún puedes “seguir la tendencia”, pero el nivel de snacks debe ser muy alto. Al mismo tiempo, la familia representará una obra de teatro junta y se sentirá tan feliz como si le hubiera tocado la lotería. También tenemos que sacar sus juguetes favoritos para que se divierta sin mirarlos para nada. Si está escondido en un rincón o grieta, no lo saques y deja que él decida cuándo salir. Este método consiste en dejar que el perro sienta por qué los petardos que le asustan le traen tanta alegría. De esta forma, poco a poco se irá adaptando a los petardos. Quizás no puedas corregir este comportamiento este año, pero el año que viene descubrirás que tu perro ha mejorado mucho.
2. Fobia a los rayos: Cómo quitar la sensibilidad a los rayos
En caso de truenos, tu actitud debe ser la misma que la de los petardos. Mientras comprenda este principio, su perro no se dejará intimidar por su actitud y considerará estos sonidos fuertes como insignificantes. Del mismo modo, si su perro tiene fobia a los truenos, puede utilizar el método anterior para preparar una grabación de truenos y mostrársela al perro. Comenzando desde el volumen más bajo, dale golosinas al perro cada vez que juegues. Las golosinas desaparecerán tan pronto como Ray deje de jugar. Practica repetidamente hasta que el perro no reaccione a la vida. Puedes aumentar el volumen poco a poco. De la misma forma, aumenta el volumen después de que se adapte.
Este es un método de entrenamiento para eliminar la sensibilidad a los truenos, pero después de todo, la intensidad de la grabación es mucho menor que la del trueno real, por lo que cuando llega un trueno real, su reacción aún puede ser un poco pobre. Debes recordar que la actitud de toda la familia lo determina todo, porque tú eres el factor más importante que afecta a tu perro. Debes dejar que tu perro sienta que el trueno que le asusta le trae una gran felicidad y poco a poco se irá adaptando a ello. Tal vez no progreses una vez, pero siempre que lo hagas bien, progresarás la próxima vez.
En tercer lugar, los perros son demasiado tímidos: la mayoría de ellos son demasiado cerrados en la infancia.
Aún existen muchos perros cuyos síntomas tímidos no han mejorado tras el entrenamiento anterior. Los perros que son demasiado tímidos se deben a que tenían una mente demasiado cerrada cuando eran jóvenes. Cuando tu perro es joven, conviene sacarlo a menudo a ver mundo después de recibir la primera dosis de la vacuna, durante unos 7-10 días. De esta forma, deja que el perro experimente la sociedad humana, dale suficiente tiempo para adaptarse a todo esto y deja que se exponga a las cosas que pueda experimentar y afrontar en el futuro. Muéstrale el auto, deja que un adulto o un niño lo acaricie suavemente y usa recompensas para hacerle saber que lo elogias por tocar estas cosas.
No da miedo hacerle saber estas cosas y sonidos nuevos a través de recompensas. Permítale experimentar cosas nuevas mientras recibe amables elogios o deliciosos bocadillos de su parte. Poco a poco, el perro se volverá más valiente y menos sensible a estas cosas, imágenes y sonidos nuevos. Sólo en el futuro podremos vivir en la sociedad humana con más confianza y no sentir miedo ni ansiedad ante los sonidos repentinos de altos decibelios.
No importa dónde vivas, en una ciudad concurrida o en un campo remoto, tu perro necesita salir a la calle. Nunca lo dejes salir a la calle porque tiene miedo de ensuciarse o contraer parásitos, lo que pondrá nervioso al perro. De hecho, los perros no necesitan este tipo de protección. Lo que necesitan es confianza en la vida. Un perro que ha estado en casa desde pequeño o que rara vez sale durante mucho tiempo se asustará si un día lo sacas a la calle, aunque suene la bocina del coche, por falta de socialización.