¿A qué debes prestar atención al dar un discurso?
1. La noche anterior al discurso, asegúrese de dormir lo suficiente para que su garganta descanse bien.
2. Llevar ropa adecuada.
3. Antes de dar un discurso, sonríe o saluda al profesor y a los alumnos.
4. Relájate mental, emocional y espiritualmente, y asume de antemano lo que pueda pasar, pero no te preocupes por ello.
5. En la plataforma, debes pararte cómodamente.
6. Por supuesto, lo más importante a lo que hay que prestar atención es el contenido del discurso. Al hacer una introducción, primero debes exponer los temas clave, para luego analizarlos uno por uno en el texto y dar nuevas perspectivas. Intente decir algo con un vocabulario rico. Si es posible, es mejor incluir algo de humor (nunca aburras a la audiencia). Preste atención a los puntos importantes, dígalos dramáticamente, luego baje la voz y vuelva a quedarse en silencio.
7. Elaborar un tema integral y realizar preparativos y ejercicios adecuados.
8. No comer antes de dar un discurso. En particular, deben prohibirse los productos lácteos, ya que pueden llenar la garganta de mucosidad.
9. Dite a ti mismo antes de dar un discurso: "¡Eres genial!", "Vamos", etc.
10. Abre la boca varias veces antes de subir al escenario. Por supuesto, puedes reírte. Si hay una razón, te volverás flexible.
11. Cuando empieces a hablar, sigue sonriendo, mira a todos los profesores y alumnos a tu alrededor y respira profundamente.
12. Las primeras palabras deben ser relajadas.
13. Encuentra una o dos caras felices y amigables entre profesores y alumnos, y míralas con frecuencia, lo que te hará sentir valorado.
14. Escuche atentamente su propia voz desde el micrófono y determine si su boca debe estar más cerca o más lejos del micrófono.
15. Utiliza más lenguaje corporal para ayudarte a atraer la atención de la audiencia.
16. Ten a mano un vaso de agua helada y bébelo cuando tengas la garganta seca.
Consejo 1: Haz un buen uso del lenguaje espacial.
El llamado espacio se refiere al alcance del lugar del discurso, la posición del orador y la distancia de la audiencia. Es mejor que el orador esté en un lugar donde pueda captar fácilmente la atención de la audiencia. Por ejemplo, en las reuniones, el presidente suele estar encima de la mesa de conferencias, porque es el lugar donde es más fácil captar la atención de los asistentes. Es allí donde es más fácil captar la atención de la audiencia, que no solo puede hacerlo. mejorar la atención de la audiencia al discurso, pero también mejorar el entusiasmo del orador. Un sentido de confianza y autoridad.
Consejo 2: Postura durante el habla.
Un consejo es estabilizar todo el cuerpo colocando los pies separados a la altura de los hombros. Otro consejo es encontrar formas de extenderse y reducir la tensión que ejerce sobre su cuerpo. Por ejemplo, introduzca suavemente una mano en su bolsillo, toque la mesa o sostenga un micrófono.
Consejo 3: Mirada durante el discurso
Cuando se habla en público, no se puede ignorar la mirada del público ni evitarla. Por lo general, una de las partes pronuncia un discurso; al mismo tiempo, busca personas entre el público que le lanzan miradas amables y gentiles. Ignora esos ojos fríos. Además, puede resultar eficaz centrarse en aquellos que “asienten” fuertemente en señal de reconocimiento para solidificar su confianza a la hora de pronunciar el discurso.
Consejo 4: Expresiones faciales durante los discursos.
Las expresiones faciales durante un discurso, ya sean buenas o malas, dejan una impresión duradera en la audiencia. Varias emociones como tensión, fatiga, alegría y ansiedad se muestran claramente en mi rostro, lo cual es difícil de controlar por mi propia voluntad. No importa cuán maravilloso sea el contenido del discurso, si la expresión es siempre insegura y vacilante, el discurso fácilmente dejará de ser convincente.
La primera forma de controlar la cara es "no bajar la cabeza". Una vez que una persona "baja la cabeza", se sentirá "frustrada" y sus ojos no estarán en contacto con el público. , lo que dificulta atraer la atención de la audiencia. Otro enfoque es "hablar despacio". Una vez que hablas lentamente, tus emociones se estabilizan, tu expresión facial se relaja y todo tu cuerpo se queda quieto.
Consejo 5: Sobre la ropa y el peinado.
La ropa también aportará diversas impresiones al público. Especialmente a los hombres orientales les gusta siempre vestir ropa gris o azul, lo que inevitablemente da a la gente la impresión de ser demasiado estereotipados y aburridos. También podrías usar algo un poco elegante para una ocasión informal.
Pero si se trata de una ocasión formal, en general son más adecuados los trajes oscuros, vestidos de noche y esmoquin. En segundo lugar, el peinado también puede crear varias imágenes. Tanto el pelo largo como la cabeza calva tienen sus propias imágenes fuertes, y la longitud de las patillas también se considera un signo de preferencia personal. Cuando te levantes para dar un discurso, piensa en cómo te vistes y qué impresión le darás a la otra persona.
Consejo 6: Voz y Acento
La voz y el acento son innatos y no se pueden cambiar de la noche a la mañana. Un informe de investigación muestra que los hombres con voces profundas son más confiables que los hombres con voces agudas. Porque una voz profunda puede hacer que las personas se sientan dignas y tranquilas. Es importante dejar clara su voz a la audiencia. La velocidad del habla también es un factor importante en el habla. Para crear una atmósfera tranquila, es importante hablar despacio.
¡Espero que esto ayude!