En realidad, la vida de los estudiantes de primer año es bastante regular y satisfactoria. Aunque casi no escucho con atención en clase todos los días, la presión de la asistencia del monitor sigue siendo bastante alta.
De hecho, cuando era estudiante de primer año, era bastante disciplinado y mi vida era muy satisfactoria. Aunque básicamente no escuchaba con atención en clase todos los días, todavía tenía que ser obediente y asistir a clase. tiempo debido a la presión de la asistencia del monitor. De vez en cuando, elegía faltar a clase por algo, y estuve muy nervioso durante todo el proceso, por temor a que el maestro me registrara como ausente de clase y reprobara la calificación final y reprobara el examen de recuperación. Después de dos semestres de conocernos, sabemos que la mayoría de los profesores son bondadosos. Si no son demasiado excesivos, te darán una nota muy alta al final del semestre, no es un problema estudiar. duro y no reprobar la clase.
En el segundo año, ya no es obligatorio estudiar por la noche. Naturalmente, la mayoría de los estudiantes ya no van conscientemente a la sala de estudio para estudiar. Durante el día, a menudo me saltaba las clases, a menos que hubiera algo especial que requiriera que el maestro me llamara por mi nombre. Obviamente, mi segundo año fue mucho más relajado que mi primer año. Había menos clases y muchos maestros no me llamaban. por mi nombre, por lo que nos volvimos aún más inescrupulosos.
Aunque a menudo me salto las clases, eso no significa que me haya rendido por completo. Siento que esas clases irrelevantes son solo para exámenes superficiales. Lo que quería aprender era algo realmente útil, así que obtuve certificados de habilidades o certificados de empleo relevantes a través del autoestudio. Además, también comencé un trabajo a tiempo parcial para complementar mis gastos de manutención. También tengo la conciencia de ahorrar dinero y viajar durante las vacaciones.
De hecho, faltar a clases es algo común entre los estudiantes universitarios, y estamos muy tranquilos al respecto. La universidad es un entorno muy libre, donde todos trabajan duro en diferentes direcciones y toman diferentes caminos. Hace unos días vi un chiste en Internet que decía que en tercer año de secundaria no hacemos el examen de ingreso a posgrado ni el examen de servicio civil. Todos los días es como celebrar el Año Nuevo. Es cierto que hay muy pocas carreras universitarias. Nos animan a estudiar por nuestra cuenta y dedicar nuestro propio tiempo a estudiar.