El cine mexicano en los años 80
Desde la década de 1980, la producción cinematográfica mexicana ha decaído y la industria cinematográfica se ha deprimido cada vez más. La producción cinematográfica se ha centrado en coproducciones con países extranjeros, como la coproducción con la Unión Soviética de “La. Red Bell” basada en la obra de J. Reed.” (1982), coprodujo “Antonietta” con Francia y España, “Under the Volcano” con Estados Unidos, etc. Los trabajadores del cine mexicano tienen opiniones diferentes al respecto. Creen que, para ganar dinero, algunos productores ofrecen buenas condiciones para las coproducciones, pero son muy duros con las películas nacionales. La mayoría de los guionistas, directores y actores de estas coproducciones son extranjeros, enterrando así a los talentos cinematográficos nacionales. Sin embargo, debido al uso de efectos especiales relativamente avanzados, las películas de coproducción se ruedan en escenas grandes y la mayoría de ellas tienen altas tasas de asistencia. Las películas más influyentes son: "El motivo de Luce" (1984), dirigida por F. Casals, que ganó la "Concha de Plata" en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián de 1985, dirigida por P. Leduc; "Frida" (1985), ganadora del gran premio; el premio en el "Festival del Nuevo Cine Latinoamericano"; "La chica Van" (1985), "Inmigrante ilegal", etc. también fueron recibidos con agrado por el público. Desde la década de 1980, el número de salas de cine en México ha disminuido y las películas extranjeras han monopolizado el mercado cinematográfico.