Me lo pasé muy bien jugando a la pelota durante un tiempo, pero mi tobillo se sentía muy mal. ¿Cómo debo evitar mis tobillos tanto como sea posible cuando juego a la pelota?
Entonces, ¿cómo podemos evitar torcernos los tobillos mientras jugamos y dominamos la cancha? Primero, debemos entender por qué el pie se torce. La razón por la que te torces el tobillo es porque el tobillo ha excedido su rango máximo de movimiento, por lo que los músculos circundantes se dañarán. Pero jugar baloncesto requiere giros bruscos y frenadas bruscas, por lo que es más probable lesionarse o torcerse el tobillo durante estos deportes intensos.
Después de saber por qué me torcí el tobillo, tengo que solucionar el problema según mi propia situación. En primer lugar, debemos fortalecer el ejercicio antes del ejercicio o en la vida diaria. Hay varias formas de fortalecer nuestros tobillos. Podemos elegir carreras de corta distancia, saltos con una sola pierna, saltos y otros métodos que puedan fortalecer eficazmente los ejercicios de tobillo, reduciendo así la aparición de esguinces de tobillo hasta cierto punto al jugar baloncesto.
Antes de practicar juegos de pelota u otros deportes debemos calentar y hacer ejercicios de calentamiento. Todos sabemos que cuando éramos jóvenes, nuestros profesores de educación física en la escuela nos hacían hacer algunos ejercicios de calentamiento antes de dejarnos hacer ejercicio. Los ejercicios de calentamiento pueden hacer que las articulaciones de todo el cuerpo se muevan, lo que favorece ejercicios más intensos más adelante, por lo que no es fácil esforzarse.