El nombre de la novela es Luo Qingzhou, la capital de Guocheng.
El autor de la novela "Algo anda mal con mi bella dama" conoce el verano de Cigarra. A partir de junio de 2023, el estado de escritura de la novela es serialización, la última hora de actualización es el 16 de junio de 2023 y el tipo de escritura es antiguo.
El lenguaje del texto completo es fluido y el estilo de escritura es libre y sencillo, lo que lo convierte en un trabajo relativamente exitoso. La novela es novedosa en material, maravillosa en concepción y vívida en lenguaje. El autor tiene una concepción ingeniosa, es bueno seleccionando puntos para ampliar y su estilo de escritura está lleno de altibajos y invita a la reflexión.
Introducción: Despierta. Luo Qingzhou se convirtió en el pequeño bastardo de la familia Luo en el Gran Imperio Yan. Para ayudar al segundo hijo de Luo a romper su matrimonio, Luo Qingzhou se vio obligado a adoptar y casarse con una novia estúpida de la que se decía que no podía hablar ni reír. No fue hasta que adoró el cielo y la tierra y pasó la noche en la cámara nupcial que de repente se dio cuenta: Esposa, ¡algo anda mal!
Aspectos destacados:
Después de la caída del país, Chu Yi se vio obligada a convertirse en la princesa de jade del país enemigo. Pasó dos años con el rey Yu, planeando en secreto venganza y resurgimiento, pero murió a manos de sus parientes cercanos. Una vez reencarnada, seguía siendo la sexta princesa más noble de Beijing; había frecuentes intrigas en el harén, los funcionarios traidores en la corte causaban caos y los bárbaros la estaban mirando. Esta vez, era su turno de causar problemas y retenerla. la familia y el país seguros, y garantizar la paz de las montañas y los ríos.
Chu estaba lista para salvar el país por sí sola, pero sus padres y hermanos la tenían en sus manos. Padre: Parezco un pollito fénix. ¡Si alguien se atreve a intimidarla, enviaré inmediatamente tropas para destruir ese país! Madre: ¿A Italia le falta dinero? Esta es la llave de nuestro almacén, que es decenas de veces más grande que el tesoro nacional. Hermanos: Hermana, ¡quiero ser la niña más feliz de Beijing!