¿Por qué a la emperatriz viuda Cixi le gusta llevar a su nuera a ver juntas "óperas vulgares"?
Cuando se trata de la emperatriz viuda Cixi, la palabra "corrupción" debe venir a la mente de todos. Cuando la emperatriz viuda Cixi estaba en el poder, controlaba todo en la corte y convertía a todo el gobierno en un desastre. Es un caos. En segundo lugar, otra cosa interesante es que siempre le gusta arrastrar a su nuera a ver óperas vulgares.
Lo favorito de la emperatriz viuda Cixi era la ópera en el palacio.
A la emperatriz viuda Cixi le gustaba ver obras de teatro, especialmente obras pornográficas. Según el libro "Mujeres Cixi" escrito por Xiang Si, un experto en la Ciudad Prohibida, el gran eunuco del palacio en ese momento, Andehai, construyó especialmente un edificio de teatro exquisito y exquisito en Xiyuan para que Cixi pudiera ver obras de teatro. Al mismo tiempo, un grupo de niños de Liyuan fueron convocados especialmente para ensayar obras de teatro, especialmente en la representación de obras obscenas, con el fin de entretener a Cixi.
La emperatriz viuda Cixi también tenía las emociones y deseos de la gente normal.
Aunque Cixi parece ser despiadada e incluso cruel en imágenes históricas, como una mujer común y corriente que quedó viuda a la edad de veintisiete años, es inevitable que sea como la gente común. con alegría, ira, tristeza y siete emociones y seis deseos. En su mundo espiritual, se sentía extremadamente vacía y sola.
Acompañada de una banda, la emperatriz viuda Cixi canta personalmente algunas canciones cada año para satisfacer su adicción a los trucos. A veces, cuando la emperatriz viuda Cixi estaba de buen humor, también ordenaba a las doncellas y a los eunucos que cantaran con ella. Por supuesto, algunos eunucos fueron entrenados por la emperatriz viuda Cixi y, naturalmente, cantaron de manera muy profesional, mientras que algunos eunucos no sabían cantar en absoluto. Además, también le pedía a su nuera que la acompañara a ver este tipo de ópera. No sabemos por qué concretamente. Quizás fue el mal gusto de la emperatriz viuda Cixi.