Una persona que admiro 400 palabras

Una persona que admiro

La persona que admiro: se apega a su puesto sin importar el frío intenso o el calor abrasador. Dirigir el ir y venir de vehículos y peatones para mantener la seguridad de las personas. Es el "tío de la policía de tránsito" que protege la seguridad de todos.

En verano, el clima es caluroso. La gente estaba tan caliente como bollos al vapor en un barco de vapor, las cigarras ladraban en los árboles y los cachorros yacían debajo de los árboles sacando la lengua. Mi tío llevó a nuestra familia de regreso a nuestra ciudad natal. En el camino vi la figura familiar de la policía de tránsito. Estaba dirigiendo el tráfico. Pensé: "En un clima tan caluroso, ¿el policía de tránsito no le tiene miedo al calor?" Mirando con atención, las gotas de sudor en la frente del policía de tránsito eran como perlas rotas que fluían hacia abajo. Pero no se aflojó la corbata, ni se quitó la ropa ni se acercó a la sombra de un árbol para disfrutar de la sombra, sino que se mantuvo firme en su puesto bajo el sol abrasador para mantener el orden del tráfico. Bajo el sol abrasador, la piel del tío de la policía de tránsito estaba un poco oscura.

En invierno el clima es muy frío. La gente vestía como osos grandes y gordos y temblaba de frío. Los animales están hibernando. Pensé: "¡El tío, el policía de tránsito, debe haber tenido tanto frío que se escondió debajo de la colcha!" Ante el viento frío, encogí el cuerpo, apreté las manos y seguí soplando aire en mi boca para mantenerme caliente. Cuando caminé hacia el borde de la carretera, me sorprendió mucho que el tío de la policía de tránsito estuviera ayudando a la anciana a cruzar la calle. No parecía tener miedo del frío. Incluso enderezó el pecho y no se encogió en absoluto. Realmente parecía un general majestuoso. Al mirar la mirada majestuosa del tío de la policía de tránsito, me pareció ver la cálida luz del sol y de repente ya no sentí frío.

Tío policía de tránsito, usted sirve a la gente, sin importar la hora o la temporada, sigue dirigiendo el tráfico en la carretera, desempeñando sus deberes meticulosamente y permitiendo que la gente viaje con seguridad. Vosotros sois los ángeles en el corazón del pueblo y la garantía de seguridad. Quiero decirles: "Habéis trabajado duro. Sois los modelos a seguir en mi corazón para siempre y sois las personas que más admiro".