Sitio web de resúmenes de películas - Cine de ética o Películas de ética - El bostezo es contagioso y afecta tanto a humanos como a animales. ¿Para qué es esto?

El bostezo es contagioso y afecta tanto a humanos como a animales. ¿Para qué es esto?

La respuesta fisiológica del bostezo puede ser un mecanismo de defensa para que los animales se mantengan alerta. Bostezar para despertar el cuerpo ayuda a estirar los pulmones y las articulaciones de los músculos, forzando el flujo sanguíneo al cerebro y aumentando el estado de alerta. Por lo tanto, ahora es posible observar respuestas de bostezo antes de grandes reuniones o eventos deportivos.

La razón por la que bostezar es contagioso es que la Universidad de Nottingham publicó un informe de investigación en "Current Biology" en 2017, diciendo que la tendencia de los humanos a bostezar contagiosamente es causada por la corteza motora primaria (el área del cerebro responsable de las funciones motoras) se activa automáticamente por la reflexión original. Cuanto más activa esté esta zona, más probabilidades tendrás de bostezar. De hecho, cuando los investigadores aplicaron una corriente eléctrica en esta área, la necesidad de bostezar aumentó, y cuando se les dijo que no bostezaran, la necesidad de bostezar aún aumentó. Porque en nuestro cuerpo existe un sistema nervioso llamado neuronas espejo. Se especializa en imitar los movimientos de otras personas.

Por ejemplo, al alimentar a un niño, le abrimos la boca. Los niños de pocos meses no son sensatos, pero imitarán tus acciones. Ya sean emociones o acciones, se ven afectadas fácilmente debido a las neuronas espejo.

En circunstancias normales, nadie bosteza sin motivo alguno. Bostezar es contagioso porque todos los que están en la habitación pueden sentir la necesidad de oxígeno al mismo tiempo. Y habrá una situación en la que cuando bosteces, despertarás el deseo de bostezar de tu pareja.

El bostezo también puede ser estimulado por factores externos. En gran medida, es como ver a otras personas tener la misma reacción. En un estudio de 2007, se descubrió que la frecuencia de los bostezos se veía afectada cuando se aplicaban compresas frías o calientes en la frente. Cuando se aplica calor en la frente, los bostezos se producen con más frecuencia que cuando se aplican bolsas de hielo en la frente. Un estudio de 2014 publicado en la revista analizó los hábitos de bostezo de 120 personas y descubrió que los bostezos eran menos frecuentes en invierno. Si la temperatura de su cerebro sube demasiado, bostezar y respirar aire puede ayudar a enfriarlo.