Reflexiones tras ver la micropelícula de día y de noche
El primer rayo de sol de la mañana brilla sobre la verde pradera, los gallos cantan contra el sol y los sonidos del ganado se escuchan desde la finca. Cuando la cámara se aleja, vemos que este brillante y brillante mundo tridimensional en realidad está escondido en el cuerpo de un elfo bidimensional. Parecía ser el espíritu del día, uno con el día. Caminando rápidamente, el elfo diurno caminó y de repente vio a un tipo durmiendo profundamente. También era un elfo bidimensional, y dentro de su cuerpo había un mundo nocturno tridimensional tranquilo y pacífico. Los corderitos cruzaban la cerca uno por uno. Obviamente, este es el elfo de la noche. Desafortunadamente, el curioso elfo del día lo despertó. Los dos pequeños se perseguían, competían entre sí y se negaban a admitir la derrota. Pero en una serie de concursos, también parecieron descubrir las fortalezas de cada uno y las similitudes con ellos mismos