Animación de uñas

Un tornillo es una metáfora que hace referencia a una parte de una máquina. Aunque los tornillos son pequeños, no se puede subestimar su función. Cualquier máquina grande y compleja suele estar fijada mediante muchas conexiones roscadas. Sólo cuando todos los componentes están en condiciones normales toda la máquina puede funcionar sin problemas. El papel de una persona es como un tornillo en la máquina de la causa del partido y del pueblo. En esta gran "máquina", no importa en qué posición se encuentre una persona o qué trabajo desempeñe, desempeña el papel de tornillo. Si todos pueden cumplir con sus deberes y trabajar duro, la sociedad estará llena de vitalidad y seguirá desarrollándose. Esta es la verdad del dicho "cuando todos echan leña, las llamas se elevarán". Hoy, cuando la reforma y el desarrollo de mi país entran en un período crítico, es aún más necesario que todos lleven adelante el espíritu de los tornillos, partan conscientemente de sí mismos y de las cosas pequeñas, logren logros en sus puestos y contribuyan a la causa de la reforma y desarrollo.

Pero en la vida real, algunas personas piensan que el espíritu del tornillo está obsoleto, así que lo olvidan y lo tiran a la basura. Algunas personas tienen una comprensión unilateral del significado del espíritu del tornillo, lo equiparan con la autocomplacencia, la mediocridad y la falta de ambiciones elevadas, y por lo tanto lo descartan. Reflejado en el trabajo, significa ser impetuoso, ávido de éxito rápido y no estar dispuesto a hacer las cosas con los pies en la tierra y concienzudamente, en lugar de entregarse al oportunismo, las intrigas y el engaño. El espíritu del tornillo en realidad contiene una verdad profunda, que no sólo es atemporal sino también de gran importancia para la época. En la era actual, la tendencia de la globalización económica se está profundizando, la ciencia y la tecnología avanzan cada día, los intercambios nacionales e internacionales y los intercambios de personal son más estrechos y la competencia es más intensa. Si una persona carece de la idea del trabajo duro, no está dispuesta a ser un idiota, desdeña hacer cosas ordinarias y persigue ciegamente la fama, la riqueza y los efectos sensacionales, puede no solo ser contraproducente, sino también imposible contribuir a sociedad. De la misma manera, si un país o una nación no pueden trabajar juntos y hacer que miles de millones de "tornillos" funcionen con normalidad y eficiencia, será difícil lograr el desarrollo y el progreso.