¿Qué nos dicen los gorriones y los niños?
Esta historia nos cuenta: ¡El amor del padre es como una montaña!
Un viejo gorrión crió a cuatro hijos en un nido de golondrinas. Justo cuando los niños apenas estaban aprendiendo a volar, un grupo de niños traviesos vino a hurgar en los nidos de las golondrinas. Afortunadamente, todos los gorriones se fueron volando con una ráfaga de viento. Pero esta vez el viejo gorrión estaba muy triste: los niños ya habían entrado al mundo, pero no les dio de antemano algunas buenas lecciones para hacerles entender que afuera había todo tipo de peligros.
El otoño ya está aquí, y muchos gorriones se reúnen en un campo de trigo. Fue aquí donde el viejo gorrión conoció a sus cuatro hijos y felizmente los llevó a casa. "Oh, mis queridos hijos, cómo he estado preocupado por ustedes todo el verano, porque no recibieron mi lección y se fueron con el viento. Pero deben escuchar mis palabras, seguir de cerca a su padre y tener cuidado en todo. ¡Es mejor tener cuidado, porque los pajaritos como nosotros no pueden correr grandes riesgos!”
Luego le preguntó al jefe dónde pasaba los veranos y cómo se mantenía. "Me he quedado en unos jardines, buscando barriles y grillos para comer antes de que maduren las cerezas."
El gorrión y el niño nos dicen que mientras amemos la vida y sepamos ser agradecidos, la vida me recompensará con felicidad y alegría. Por un lado, le dice a la gente que si los niños son inteligentes y no escuchan los consejos, sufrirán una pérdida. Por otro lado, les dice a las personas que sólo dejando que los niños reciban capacitación en la práctica sus habilidades para la vida podrán crecer más rápido.