Cómo utilizar un vibrador
Gira la frecuencia al mínimo y toca tu clítoris. Para algunos, es apenas una sensación; para otros, la sensación es lo suficientemente fuerte como para levantarse de la cama. La sensibilidad del clítoris varía de persona a persona. Si esta intensidad mínima es demasiado para ti, intenta resistir los labios para que no entren en contacto directo con el clítoris; o utiliza una toalla o manta para separar el vibrador de ti, o simplemente usa ropa interior. Si necesitas más intensidad, aumenta lentamente la frecuencia. En resumen, necesitas encontrar una frecuencia moderada.
El lugar más cómodo para jugar. Algunas prefieren la parte frontal y central del clítoris, otras prefieren el contacto indirecto (introduciéndose furtivamente en lugar de precipitarse). Imagina que tu clítoris es una deliciosa tarta de manzana cortada en cuartos. Debes probarlos uno por uno y comparar los diferentes sabores.
Cuando encuentres la intensidad óptima, prueba diferentes patrones de vibración (si están disponibles). Experimenta con cada modo y encuentra tu favorito. Aunque no hay un modelo determinado que te haga volar definitivamente, muchas mujeres descubren que tienen una preferencia. Por supuesto, si los distintos modos le confunden, simplemente utilice el modo normal.
Es divertido probar diferentes intensidades y modos, pero si estás listo para un orgasmo, definitivamente querrás permanecer en un ritmo determinado. Cuando el vibrador entre, deja que presione contra el clítoris y empieza a trabajar. Es posible que notes que tu cuerpo se retuerce ligeramente, lo cual es normal. Simplemente deja que tu cuerpo reaccione naturalmente.