Bloqueo (micronovela)

Un mochilero vio que la yurta del pastor estaba abierta y tenía mucha sed, así que entró. Había té con leche en la mesa y lo bebió con una tetera colocada sobre la mesa. Cuando quiso irse, de repente se sintió incómodo y decidió agradecer a los pastores cuando regresaron.

Cuando oscurece, los pastores regresan. Después de que el huésped agradeció al anfitrión, le preguntó por qué no había cerradura. La respuesta es desconocida. El invitado habló con gran detalle. Si la carretera principal está cerrada, ¿cómo pueden los transeúntes entrar con hambre en la zona de comida y bebida? También salgo temprano y vuelvo tarde. Cuando tengo hambre, como en las yurtas de otras personas.

¿Te preocupa el robo? Los pastores dicen con orgullo que no hay ladrones en la pradera, por lo que no hay candados y nadie sabe nada de candados.

¡Los invitados quedaron tan gratamente sorprendidos que regresaron a la ciudad para escribir notas de viaje y se llenaron de elogios! Todos sabían que acudían en masa a la pradera. Después de unos días, la comida y la bebida desaparecieron de las yurtas de todas partes. Los pastores volaron a la ciudad en busca de clientes y compraron algunas cerraduras de hierro. A partir de entonces, todos los hogares sintieron que su casa estaba cerrada.

¡Las historias que conocerán las generaciones futuras son todas fantásticas y llenas de emoción!