Sitio web de resúmenes de películas - Bellezas de anime - ¿Qué es la fobia al armario?

¿Qué es la fobia al armario?

La claustrofobia, también conocida como claustrofobia, es una de las fobias más comunes. La claustrofobia es un trastorno de ansiedad por los espacios cerrados. Las personas con claustrofobia pueden experimentar síntomas de pánico o temer que se produzcan síntomas de pánico en determinadas situaciones, como en ascensores, trenes o aviones. La claustrofobia se refiere a una enfermedad psicológica que provoca miedo a los espacios cerrados, como el miedo a los ascensores, el miedo a los coches y los aviones. Es una forma de fobia.

Las personas propensas a sufrir ataques de pánico suelen desarrollar claustrofobia. Si el pánico se produce en un espacio cerrado, se sentirán asustados porque no pueden escapar de la situación. Las personas con claustrofobia pueden experimentar dificultad para respirar en lugares cerrados, teatros o ascensores. Como muchas otras afecciones, la claustrofobia puede ser el resultado de un trauma infantil.

La claustrofobia generalmente se considera un contraejemplo de la agorafobia, pero este argumento es una simplificación excesiva: quienes padecen claustrofobia tienen miedo de estar en multitudes, lo que también es una característica de la agorafobia. Por lo tanto, estar en una plaza de un pueblo llena de gente puede desencadenar tanto claustrofobia como agorafobia. Las manifestaciones específicas son las siguientes:

1. Al entrar en algunos entornos especiales, el miedo se producirá de forma involuntaria. Incluyendo plazas vacías, lugares públicos abarrotados, ambientes cerrados, etc., como estadios, comercios, teatros, autopistas, ascensores, autobuses, trenes, oscuridad, etc.

2. Siempre me preocupa desmayarme, tener algún tipo de enfermedad o perder el control en este lugar, pero no podré escapar del lugar.

3. Mientras estés en un ambiente aterrador, sentirás miedo de que algo suceda e involuntariamente querrás escapar. Si no puedes escapar, tendrás palpitaciones, dificultad para respirar. sudores fríos, temblores en manos y pies y espasmos musculares, o incluso desmayos. Pero una vez que dejas el ambiente aterrador, puedes volver a la normalidad por tu cuenta.