¿Qué nos dice "El amor en los tiempos del cólera"?
Cuéntanos que el amor es la emoción más importante para el ser humano, ya sea un amor momentáneo, como el amor salvaje de Florentino con tantas mujeres, o el matrimonio de Juvenar y Fermín, o el apego de Florentino a Fermina por. 51 años, 9 meses y 4 días, son todo amor.
El origen directo de la creación de "El amor en los tiempos del cólera" fue cuando Márquez vio en el periódico una noticia: una pareja de ancianos que llegaban a su pueblo natal hace cuarenta años para revivir su viaje de luna de miel inesperadamente... El barquero que los sacó fue asesinado a golpes con un remo para robarles el dinero que llevaban consigo.
Son una pareja de amantes secretos que llevan cuarenta años de vacaciones juntos, pero cada uno tiene un matrimonio feliz y estable, y la historia de sus hijos y nietos se mezcla con la historia de amor de sus padres. cuando eran jóvenes, que es la pluma del autor. La novela de ficción estableció el lapso de tiempo y la estructura de tensión, pero la oportunidad creativa más importante para Márquez provino de su comprensión personal del amor y el conocimiento de la cultura latinoamericana.
Resumen argumental de la película "El amor en los tiempos del cólera"
En Cartagena, Colombia, a finales del siglo XIX, el operador de telégrafos Florentino Ariza (interpretado por Javier Bardem) Se enamoró de Fermina Daza, la hija de un rico hombre de negocios (Giovanna Mezzogiorno), tocó el corazón de Fermina Daza con sus apasionadas cartas de amor y los dos rápidamente se enamoraron.
Sin embargo, debido a la disparidad de estatus, Fermina Daza tuvo que sucumbir a su padre y abandonar Cartagena. A los ojos de la joven Fermina Daza, el amor entre ambos era sólo una ilusión.
Unos años más tarde, por arreglo de su padre, Fermina Daza se casó con el doctor Juvenal Urbino (interpretado por Benjamín Bratt), un médico que le gustaba. Durante el período del cólera, un marido médico no sólo aporta una vida cómoda, sino que también ofrece una sólida garantía de vida. Fermina Daza poco a poco fue olvidando lo ocurrido en aquel entonces.
Pero Florentino Ariza no ha olvidado que el joven que en aquel momento no tenía nada heredó la herencia de su tío y se convirtió en un rico comerciante de barcos. Experimentó diferentes mujeres, pero no podía olvidar a Fermina Daza en su corazón. Él podía. Todo lo que hizo fue esperar el día en que nos volviéramos a encontrar. Aunque habían pasado más de cincuenta años, sus sentimientos por ella seguían siendo los mismos que antes.