La larga historia de Lol sobre Riven
En Noxus, mientras tengas la fuerza, todos tienen la oportunidad de llegar a lo más alto. Esto no tiene nada que ver con raza, género y estatus social. Ruiwen creía firmemente en esto y trabajó duro para salir adelante. Mostró un gran potencial como soldado y, a pesar de su baja estatura, se entrenó para dominar el uso de una espada larga. Es una guerrera brutalmente eficiente cuya fuerza proviene de sus convicciones más íntimas. Cuando se lanzaba al campo de batalla, el corazón de Raven nunca flaqueaba: desdeñaba las limitaciones morales y no temía el miedo a la muerte. Por lo tanto, Raven se destaca entre sus compañeros como representante del espíritu noxiano. Su extraordinario celo fue reconocido por el alto mando, y Raven recibió una espada rúnica negra forjada con magia noxiana. Esta arma es más pesada que el escudo ligero promedio, perfecta para el gusto de Riven. Pronto, Raven fue asignada a Jonia como parte de la invasión noxiana.
La guerra rápidamente se convirtió en una masacre. Los soldados noxianos siguieron las máquinas de guerra de Zorn a través de las Tierras Muertas. La guerra no es la batalla gloriosa para la que Raven está entrenada. Se le ordena destruir los restos del enemigo derrotado y gravemente herido. A medida que avanzaba la invasión, quedó claro que la guerra ya no se trataba de reemplazar al régimen jónico, sino más bien de destrucción y masacre. En un encuentro, las fuerzas de Raven fueron rodeadas por fuerzas jónicas. Pidieron refuerzos cercanos, quienes respondieron con balas de cañón bioquímicas del Alquimista Singi. Raven miró a su alrededor. Los soldados de ambos lados fueron víctimas de este horrible bombardeo. Raven hizo todo lo posible por escapar del campo de batalla, pero este recuerdo no pudo borrarse. Ahora que los funcionarios noxianos habían agregado a Raven a la lista de muertos, Raven vio la oportunidad de comenzar una nueva vida. Ella destrozó la hoja rúnica, cortó los lazos con el pasado y se exilió a su antojo. Ahora Raven busca una oportunidad para expiar sus pecados y luchar por el verdadero espíritu noxiano en el que cree, en sus propios términos.
"Entre la guerra y el asesinato, acechan nuestros demonios interiores"