Reflexiones sobre la primera lección del año escolar 2014 El tema es: Ayuda a los demás y hazte feliz.
En la vida, las personas que respetan a los demás definitivamente serán respetadas por los demás. ¡Esto es algo natural!
Cuando empujas a alguien, le dices avergonzado: "Lo siento, no fue mi intención". Creo que cuando escuche tu sincera disculpa, definitivamente te lo dirá. "No importa."
Cuando queremos tomar prestadas las cosas de otras personas, debemos obtener su consentimiento, de lo contrario, si quitas las cosas de otras personas por tu propia iniciativa, definitivamente los pondrás ansiosos, así que, no importa lo que quieras. Para pedir prestado a otros, debes obtener su consentimiento, porque este es el respeto más básico.
Cuando se te cae algo y aparecen frente a ti un par de manos desconocidas, cuando te ayudan a recoger algo, cuando te lo entregan, nunca debes olvidar decir: “Gracias. " . Tres palabras simples, tres palabras que salen de tu boca sin esfuerzo. Cuando digas estas palabras con sinceridad, estarás muy feliz en tu corazón y sentirás que alguien te está ayudando con sinceridad.
Cuando vemos al abuelo, a la abuela o a una mujer embarazada en el autobús, ¿gritamos: "Abuelo, abuela, tía, venid a sentaros aquí conmigo?" Cuando escuchan esta frase se sienten muy felices y dicen: “Hermanita, hermanito, gracias”. Sí, cuando escuchas esta frase, te sientes dulce en el corazón y piensas: ¡Resulta que ayudar a los demás es tan feliz! Sí, empieza por las cosas pequeñas, empieza por el costado. Respetar a los demás significa respetarte a ti mismo.
Cuando estemos haciendo algo, si hay personas mayores a tu lado, no debemos olvidar dejar ir primero a las personas mayores, porque debemos saber respetar a los mayores y amar a los jóvenes. Cuando cedas ante el anciano, seguro que te dirá: "Gracias, niño". Mira, tus palabras y acciones pueden ganarse el respeto de tanta gente.
En la vida, si quieres ser respetado por los demás, primero debes aprender a respetar a los demás y conseguir: “Yo soy para todos y todos son para mí”. razón. Recuerda: respetar a los demás significa respetarte a ti mismo.