¿Qué significa SARA?
Sarah (también llamada Sara), también conocida como Sara en chino, es una palabra que ha sido muy utilizada en la historia, ha penetrado en diversas culturas y se ha extendido por todo el mundo.
"Sara" tiene diferentes significados en diferentes países, como sigue:
Hebreo: "mujer noble" o "princesa" (diferente de "Sara" en el significado bíblico)
Árabe: agradable
Persa: puro; excelente, excelente.
(Un par de muñecas persas se llaman tradicionalmente "Dara y Sara", "Dara" es un niño y "Sara" es una niña)
Japón: "Sara" se considera Es el árbol donde nació Buda. También conocida como una flor muy rara, florece solo un día en Kioto (la antigua capital de Japón) en el verano.
Información ampliada
Sarah en hebreo, árabe, persa, griego, español, italiano, portugués, inglés, esloveno y serbio Existe este término.
"Sara" es un nombre de la Biblia, mencionado en los "Orígenes" del Antiguo Testamento. Su nombre estaba escrito como Sarai en ese momento. Cuando ella y su esposo (Abram) huyeron de su lugar de residencia original y pasaron por Egipto, fueron expulsados por el faraón egipcio. Dios vino a ellos y les dijo que serían los creadores de la Tierra Prometida para Israel. De lo contrario, en adelante serán conocidos como "Sara" y "Abraham". Cabe señalar que aunque "Sarah" a veces se traduce como "princesa" o "diosa", literalmente significa "princesa de todas las cosas", y el nombre anterior de Sarah, "Sarai", es simplemente "princesa".
Con la continua expansión del cristianismo por Europa, "Sarah" se ha ido convirtiendo poco a poco en parte del idioma de los países europeos. Las personas famosas llamadas "Sarah" en la historia incluyen a Santa Sara (la patrona de los gitanos y la primera duquesa de Marlborough), la actriz del siglo XIX Sarah Bernhardt y la autora estadounidense del siglo XIX Sarah Hale.
"Sarah" ha sido popular durante cientos de años, especialmente en Gran Bretaña y Estados Unidos. Más extendido a finales del siglo XX. Una de cada cinco personas llamadas "Sarah" usa la ortografía "Sara". A pesar de la popularidad actual de "Sarah", el número de personas que utilizan este nombre en los Estados Unidos ha disminuido drásticamente. Las personas contemporáneas llamadas Sarah incluyen a Sarah Ferguson, condesa de York, las cantantes Sarah Brightman y Sarah Connor, y las actrices Sarah Michelle Gellar y Sarah Jessica Parker.