¿Qué historia cuenta Honey Trap?
En abril de 1946, un tribunal de Florida condenó al espía alemán John Herbermann a 20 años de prisión. Leah Herberman, la alegre, entusiasta y encantadora hija de John, estaba disgustada y profundamente afectada por los pecados de su padre. Regresó a casa desde la corte y encontró a una amiga para alejar sus problemas bailando, pero apareció un extraño invitado no invitado. Temprano en la mañana, después de que todos estaban borrachos, Liara, borracha, llevó al extraño a dar un paseo. Después de que la policía lo detuvo, descubrió que el extraño era Dipu, un oficial que trabajaba para la inteligencia estadounidense.
Bajo la persuasión de Dipu, Leah aceptó servir al país. Los dos llegaron a Río, Brasil, donde se reunieron los restos de los nazis, donde recibieron la noticia de que John se había suicidado en prisión. Pronto, Dipper se enamoró de Leah. En ese momento, Dipper recibió una orden para que Leah sedujera al líder nazi Alex Sebastian para obtener información. Dipper antepone los intereses del país y le pide a Leah que realice la tarea, pero Leah piensa que Dipper no la ama.
La inteligente y alerta Leah utilizó la antigua relación de su padre para ganarse la confianza y el amor de Sebastian. Decepcionada por Dipper y a instancias de sus superiores, Leah acepta la propuesta de Sebastian. Después del matrimonio, Leah descubrió mucha información importante para la agencia de inteligencia y sintió que la bodega de vinos de su casa era sospechosa. Dipper usa el grupo de Leah para ir a la casa de Sebastian. Leah le consiguió la llave de la bodega. Encontraron vino tinto con minerales en la bodega. Sebastian se enfurece cuando se da cuenta de que Leah le ha robado las llaves y descubre su identidad e intenciones.
Para evitar que sus asociados nazis supieran que había filtrado secretos, Chebas, siguiendo las instrucciones de su madre, le dio a Leah un veneno crónico en un intento de hacerla morir inconscientemente. Aunque Leah descubrió más tarde el secreto, ni siquiera tuvo fuerzas para escapar. Dipper se dio cuenta de que algo andaba mal, fue a la casa de Sebastian para preguntar sobre la situación y rescató con éxito a Leah aprovechando la debilidad de la madre y el hijo de Sebastian de no poder revelar secretos a sus cómplices nazis.