Reír es mejor que llorar.

Aunque hay muchas decepciones en nuestras vidas, ¡todavía tenemos que creer que reír es mejor que llorar! Vivir un día es una bendición; si vives un día, debes apreciarlo; si vives un día, debes vivir feliz y cómodamente. Sólo cuando la gente tiene una buena actitud puede estar despreocupada. Cuando lloras porque no tienes zapatos para ponerte, te das cuenta de que hay personas que no tienen pies, así que no llorarás más. Cuando estés ansioso por un resfriado, encontrarás a esos pacientes terminales sonriendo, así que ya no te preocuparás más. Cuando otros te dicen: "Eres demasiado fuerte, nunca veré tus lágrimas", solo tú sabes que tus lágrimas nunca brotarán frente a los demás, sino que se secarán en silencio o se tragarán en silencio. Todo porque lo sabes: Dios nunca favorece a un cobarde.

Porque lo sabes mejor: ¡reír es mejor que llorar!

Si eres una persona inteligente, debes estar tranquilo y despreocupado. No estés contento con las cosas, no estés triste contigo mismo. No te sientas orgulloso cuando estés orgulloso y no te sientas inferior cuando estés frustrado. Ante los elogios de los demás y la tentación de los deseos materialistas, puedo mantener la mente clara y mantener la calma; ante la traición y la desilusión de mis amigos, puedo reírme de ello. No llorarás por la leche derramada de hoy, ni te preocuparás por la lluvia o el sol de mañana. Simplemente pase cada minuto de hoy con calma y tranquilidad, y pase cada mañana y tarde extraordinarias. Sólo cuando las personas están tranquilas y calmadas pueden tener una sonrisa elegante.