¿Cómo te sentiste después de leer el final de la novela "Paradise Lost" de Junichi Watanabe?
El Sr. Watanabe dijo una vez: "Aunque "Paradise Lost" termina con la muerte de dos personas por amor, este tipo de muerte no es una tragedia, sino una muerte de resurrección, una muerte que sublima las emociones hasta la eternidad. Esto superó muchas dificultades y confusiones, logró la trascendencia y finalmente llegó a un extremo". Esta es, por supuesto, la ilusión del Sr. Watanabe, y puede que no esté claro si los lectores están de acuerdo con su punto de vista. El héroe y la heroína pagaron un alto precio en el proceso de buscar el amor supremo, hasta que perdieron todo, como el matrimonio, la familia, el afecto familiar, etc., y finalmente llegaron al extremo que los hizo soñar con ello. Justo cuando estaban intoxicados al extremo, la cordura restante luchaba por decirles una realidad cruel: tuvieron la suerte de ser los visitantes finales, y convertirse en los residentes permanentes finales era una ilusión. Una vez que expire su visa, deberán irse incondicionalmente o volver a la vida normal o caer al abismo; Sin embargo, en este momento ya no existen las condiciones necesarias y suficientes para volver a la vida normal. Cayendo al abismo, el suicidio parece ser la única opción. Desde este punto de vista, la llamada muerte tranquila del amor por parte del héroe y la heroína no es fruto de sus deseos originales, sino un signo de impotencia, medidas forzadas y desesperadas. No saben que esas cosas mundanas que se abandonan en busca del amor supremo son todos los caparazones de la ética tradicional, que fluyen con la sangre de la ética tradicional y brillan con la luz de la ética tradicional. En lugar de decir que abandonaron todas las cosas seculares, es mejor decir que todas las cosas seculares los abandonaron a ellos, y la mano invisible que realmente controla todo esto es precisamente la ética tradicional. Fue desde el momento en que se convirtieron en parias de la ética tradicional que comenzaron a caer en el abismo de la soledad, el miedo y la desesperación, y se embarcaron en el camino sin retorno a la muerte. En este sentido, "El paraíso perdido" debería ser una tragedia que desafíe la ética tradicional.